Es tan difícil ser libre?
sí
pues justo eso pretendo, nada más.
Ya me he acostumbrado a hacer más o menos lo que quiero y a administrar con disciplina -hasta el punto de disfrutar- mis obligaciones -lo que solamente serían servidumbres de otro modo-. Me refiero a trabajar y a las cientouna cosas que tenemos que hacer en relación con eso. Pero en mi caso es trabajar prácticamente la única.
Quiero decir que hacer lo que te apetece también requiere pensar mucho, no se puede hacer así, sin más, porque saber lo que quieres, te apetece, te conviene, aunque es bastante sencillo, a veces no sabemos hacerlo y nos quedamos sin saber qué queremos.
Sin salirme de la línea de lo que me pide el cuerpo, muy acostumbrado ya, a fuerza de prueba-error-prueba-error... tantas veces.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario